Cómo integrar tus leggings en "looks" elegantes.
¿sabes descontextualizar unos leggings y convertirlos en una prenda sofisticada? En Ônne te damos las claves.
Qué lejos queda aquel tiempo en que la moda y las tendencias se regían por la norma universal de "de diario y de fiesta n y "para el día y para la noche". Sí, aquellos códigos de vestimenta tradicionales que decían que los zapatos de tacón eran un calzado exclusivo de looks arreglados, que las lentejuelas no podían salir de casa antes de las nueve de la noche y que los leggings solo servían para practicar deporte y para combinarse con sudaderas y zapatillas deportivas. Ahora, todo esto ha dejado de ser inamovible y las fronteras entre lo casual, lo deportivo y lo sofisticado se han difuminado.
Es por ello que los diseños de la firma Ônne, especializada en activewear y swimwear, han trascendido el contexto deportivo y se han tornado válidos y, sobre todo, apetecibles, para lucir a diario. Y también, de noche.
La prenda que sin duda alguna se ha visto más beneficiada en esta especie de globalización estilística de Io deportivo es el leggings. De hecho, están por todas partes: no hay plan o estilo al que no se adapten. En Instagram, puede verse su versatilidad gracias a la maestría con la que las prescriptoras de moda hacen uso de ellos. Estas son algunas de las formas en que combinaremos los leggings esta temporada para armar estilismos elegantes y sofisticados.
La pieza que necesitamos para ello es, claramente, la americana. Si hace unos años cuadrar en un mismo outfit un par de leggings con una blazer nos hubiera parecido una rareza, hoy nos parece lo más estiloso del mundo. Sirven todas: oversize, entalladas, crop... Atesoran una elegancia innata que se contagia inmediatamente al look deportivo. Funcionan también las de vinilo, las clásicas y sartoriales, las de colores chillones. Ayudan también las chaquetas largas, como bien demuestra la directora creativa, Anine Bing.
La clave está en descontextualizarlos y combinarlos con prendas, texturas y accesorios típicamente nocturnos: unos zapatos de salón, un abrigo de pelo, unas bailarinas de lentejuelas...
¿Serán los leggings el nuevo vestido de fiesta?